Los bosques medievales: Auroras transitorias (Fragmento).
Autor: Gerardo del Río Olivera
Primera edición 2018
SUICIDIA
Cuando no hablas
mido la distancia entre tus venas
y el seguro de la clavija
Te consuelo con alegría consumida
como vampiro desangrado y sediento de luz
arrastrando la trasnochada de tu siempre cautiverio
Con una vela roída por los salvajes diminutos de mi celda
Y quedaran por siempre todas tus cicatrices
Pan añejo sobre la mesa/ Casa de larvas y termitas
Cuando no hablas
dices suspiros que yo me creo
que no son más que flores marchitas
tronando sin cesar en mi cabeza
Como Romeo he sido descubierto
y con un hacha secas mi rostro al afilarla
para cortar raíces que te fueron impuestas
y que te mantienen atada a esa depresión
Dame tu vida/ amor fresco/ ¡Ya no mueras!
Dámela en vida/ ¡Poco te pido!
Que a tu muerte le hace falta el principio
para cambiar lo más negro que nos dejó tu pasado.
SUPERSTICIONES
¿Por qué ya no hay mujeres que tiemblen al besar?
¿Adónde se ha ido esa piel chinita?
¿Por qué nos desvestimos con tanto apuro?
¿Hacia dónde vamos al enamorar con agenda en mano?
Hoy se cree que no hay tiempo para titubeos
Pues hoy los parpados del amor se asfixian
Las dentaduras del resentimiento se prensan
y nos queremos tapar el rostro con la escarcha
Quizá hoy nuestra pareja nos sorprenda
Quizá tras de la nuca los dedos
Quizá aunque este lejos/ en mi sensibilidad...
¿Por qué no hay mujeres que tiemblen al besar?
Hoy todos los corazones están agitados por el crédito
y las mujeres solo quieren usan pantalones y la cabeza
La nieve cae de los cielos rojos/ el sol no está en la piel
y la madurez nomás nos sirve para estar aburridos
A esta edad uno ya ha despilfarrado tanto semen
A esta edad/ tanta displicencia y tan poco comprometidos
Puede ser que ya no tiemblen porque ya no damos sorpresas
Por la culpa son vírgenes y por el morbo dejan de serlo
Ó rápido se casan sin saber lo que es la ternura y el orgasmo
Es de verdad un secreto digno de conventos
El temblor sigue a veces/ pero ya no es por amor sino por miedo.
ARAÑAS DE AGUA
Son paredes de cristales
Luego escurre sangre fresca que brilla
Como la buena luz de un cirio pascual
y las calaveras de un automóvil sonámbulo
Los dedos y mis anillos de aire/ se han casado
La negrura de una piedra pulida es espejo
Como cristal huérfano de utopías
Que traspasa el alma y te deja perplejo
Son paredes de cristales
Luego escurre/ tu sangre fresca que brilla.
EL DESDÉN DE LOS ACASOS
Desde mi sombra/ capricho en luto de ambiciones
Por la insigne desdicha de corazones perpetrados
Lúgubre idea de aquellos días/ el tiempo de tus ojos
Lo más terrible que se cristalizó ante los míos
Y si vivo y si anhelo sobre los días más solitarios
como perros de caza ante la espantosa marca del fin sin ser
Acá rezaré/ acá desfalleceré/ si es preciso moriré
Sobre mis manos surge la pena de tu sombra que se fue.
IMAGENES
Saque una foto del armario
La saqué sin poder evitarlo
Saque una foto del armario
y me encontré contigo
Ya no te quiero ver
Cerraré los ojos.
CASCADA
Quiero acallar lágrimas que se dicen para bien o mal gotas de arena
Finas gotas de simulacro mediocre en el destierro de la risa
Porque el espacio brilla como el aura de una pareja que se divorcia
Ahí en la preciada pluma de casa/ promesa/ sin vigía y pronto retorno
Como si no importara y mi desventura fuera papel enclenque bajo el agua
Ahí donde mi entereza es un juguete de cristal para niño hiperactivo
Ahí donde el futuro es un crucigrama sin preguntas
Del diván yo sacaré tu memoria empolvada y la aderezare con imprudencia
Imaginando cosas / pues es ahí donde acaba toda conjetura
En el absoluto/ sobre la neblina oxidada de un futuro “te recuerdo”…
ALMAS GEMELAS
Aún me niego a olvidarme de ti
Aún te refiero en mis albores
De esta ausencia dolorosa y compartida
que se apodera de todos los seres
Como un canto de ultimátum
si el gallo se atreviese
Como la vida
Si el sol se encaprichara a no salir más
Si estuvieras aquí conmigo
Si tu alma correspondiera a mi alma
Si vivieras al otro lado del océano
eso estaría bien
Pues así mientras tu duermes me visitas
y yo en la labor del día te presiento
Aún me niego a olvidar esta ilusión juvenil
Aún me niego a cerrar con hilo rojo mis compromisos
Aún te extraño sin saber sí es que existes
Soy amante de esta fantasía.
Continuará...
